Matrimonio

El matrimonio es un sacramento de servicio que consiste en la unión entre el hombre y la mujer ante Dios, con el propósito de fundar una familia cristiana. Cualquier persona confirmada y soltera puede contraer matrimonio eclesiástico. Si un miembro de la pareja no es católico, se puede solicitar un permiso especial, el cual es otorgado por el obispo y recibe el nombre de dispensa.

Significado del matrimonio

El matrimonio simboliza el amor y la entrega mutua de la pareja en un proyecto de vida común, basado en la fidelidad y el servicio. La familia que se constituye por el matrimonio representa la unidad primordial de la Iglesia y la sociedad, ya que en ella se enseñan y multiplican los valores de convivencia.

Por esto, el matrimonio es el único sacramento en que los contrayentes actúan a la vez como ministros, sujetos y signo visible. Solo en este caso, el sacerdote actúa como testigo cualificado y transmite la bendición de Dios a la pareja.

La expresión que sella el sacramento del matrimonio es el consentimiento mutuo de la unión, que se produce cuando los miembros de la pareja dicen: «Sí, acepto».

Los símbolos complementarios del bautismo son los anillos y las arras. Los anillos simbolizan la alianza amorosa y la entrega mutua de los esposos. Las arras (monedas)simbolizan la comunión de los bienes materiales y espirituales de la pareja.

Fundamentos bíblicos del matrimonio

El fundamento bíblico del sacramento del matrimonio se encuentra en el libro del Génesis (capítulos 1 y 2), donde se habla de la formación de la primera pareja, Adán y Eva. El evangelio también sustenta el sacramento del matrimonio. Allí, Jesús refrenda el vínculo sagrado entre hombre y mujer, y se pronuncia en contra del acta de repudio (Mateo 5, 31-32; Mateo 19, 1-12; Marcos 10, 1-12; Lucas 16, 18).